DEDICATORIA Y
AGRADECIMIENTOS
A mi padre, mi consejero y único amigo quien siempre
confió en mí y quien realmente conocía mi naturaleza; su gran amor al prójimo
me mostró un camino mas humano.
Los señores Vaughan del Grupo Andes fueron mis maestros, quienes
sembraron las bases de una disciplina estricta y con un ordenamiento mental
perfecto. Al principio no entendí porque el orden y el aseo era la primera
premisa de sus conceptos para el manejo de los cultivos, pero con el tiempo, vine a aprender lo valiosa de esta
frase, la sencillez de este concepto da un principio de diciplina y hace que las cosas importantes no se topen con la confusión de un deshorden que no da claridad de pensamiento; esta fácil idea la apliqué por siempre.
Al Dr. Gómez le aprendí que en las cosas primero es lo
sencillo que lo complicado, le admiré su don de liderazgo, con una intuición
para descifrar los problemas nunca vista. Su inmensa dedicación y capacidad de
trabajo.
Al ingeniero Julio Hidalgo Barahona, su gran conocimiento
de la gente y capacidad de comprensión, su inteligencia y su proyección
futurista, es un líder abierto al cambio, a la nueva tecnología, valiente,
generoso, capaz de aceptar siempre lo más adecuado.
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